El artículo del profesor Luis Ferrando Lada “Los obispos: Camino y Reig” (el enlace está ahí arriba) publicado hoy en el diario Levante-EMV ha llamado la atención de varios amigos blogaires miembros de la Iglesia Católica. Quisiera, en uso de lo que Ferrando denomina “espacio [de] la libertad evangélica y paulina”, comentar este texto y he de decir que me resulta difícil hacerlo por una razón sencilla: no encuentro una tesis central que aceptar, criticar o refutar… O bien, la tesis del artículo es tan fútil que no sé a qué vienen las adhesiones de los amigos a que aludía antes, a saber: las “actitudes”, la “imagen”, el “estilo” (el talante, vamos) de la Iglesia Católica de ahora mismo en España es deplorable. Punto. Ya no hay nada más en el escrito del profesor Ferrando. Bueno, hay toda la retahíla habitual de insultos a la jerarquía católica (“periodo oscuro y nefasto”, “mediocridad”, “prepotencia”, “solapada nostalgia”, “absolutismo”, “talibanidades”), cuidándose muy mucho el autor de diferenciar tajantemente (esto también es bastante habitual) entre la “Iglesia institucional” y los “cristianos sencillos que desean un rostro más misericordioso y un lenguaje más abierto”. Si sólo se trata de eso, de ofrecer un “catolicismo de rostro humano” (las comillas son mías ahora) no es cuestión de discutir: se pone al padre Mundina, que bien majo que es, de portavoz de la Conferencia Episcopal y santas pascuas.
Bromas aparte (y dejando de lado el recurso tramposo de amontonar preguntas retóricas que dan por supuestas las respuestas que ya ha diseñado el interrogador) sería cuestión de criticar a la Iglesia en función de los documentos que emanan de la Conferencia Episcopal o de los obispos, más que de insistir en cuestiones de marketing. En este sentido cabría interrogar al profesor Ferrando (y a los hermanos en la fe que están de acuerdo con él en este rollo del talante) qué opina de los textos referidos a teología y laicidad, matrimonio entre personas del mismo sexo, terrorismo, aborto, familia, crisis económica, etc. Creo que ahí está el debate y no en si un obispo es más o menos facha o más o menos resultón ante las cámaras. Si la discusión ha de limitarse a estos asuntos, apañados estamos.
Como dice el profesor Ferrando, “esperemos que el Adviento nos purifique a todos. "
Feliz día de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora.
Bromas aparte (y dejando de lado el recurso tramposo de amontonar preguntas retóricas que dan por supuestas las respuestas que ya ha diseñado el interrogador) sería cuestión de criticar a la Iglesia en función de los documentos que emanan de la Conferencia Episcopal o de los obispos, más que de insistir en cuestiones de marketing. En este sentido cabría interrogar al profesor Ferrando (y a los hermanos en la fe que están de acuerdo con él en este rollo del talante) qué opina de los textos referidos a teología y laicidad, matrimonio entre personas del mismo sexo, terrorismo, aborto, familia, crisis económica, etc. Creo que ahí está el debate y no en si un obispo es más o menos facha o más o menos resultón ante las cámaras. Si la discusión ha de limitarse a estos asuntos, apañados estamos.
Como dice el profesor Ferrando, “esperemos que el Adviento nos purifique a todos. "
Feliz día de la Inmaculada Concepción de Nuestra Señora.
1 comentari:
Quasi estic d'acord amb tot el que dius. Però és que, no sé si és que ho miren, des d'una altra òptica tu i jo, l'Església-jerarquia-sacerdots en general (aquesta que ens ha tocat "patir") està bastant allunyada del poble pla. Crec que els està passant com als polítics que, una vegada tenen l'escó, se'n desentenen totalment. Bona vesprada... de la Immaculada Concepció.
Publica un comentari a l'entrada